Amante de los pequeños y de los grandes viajes, sobre todo de África, donde he convivido con distintas tribus, y de la alta montaña, pasiones que he tenido que aparcar hasta que el pequeño que he llevado a este mundo me permita recuperarlas poco a poco.

Siempre me ha movido la curiosidad por saber más y más en mi campo, aspecto del que gozo y que me permite dar el máximo de mí hacia mis pacientes.

Una frase: el conocimiento es la mejor base para que aflore el instinto para saber lo que tienes que hacer

La brisa marina, el contacto con la arena, el sonido de las olas y la visión infinita hacia el horizonte son el escenario perfecto donde encuentro mi conexión con la naturaleza.

El gran interés que tengo por los idiomas me permitió descubrir que la lengua no es la única manera de hablar con las personas. Descubrí que mis manos, a través de la fisioterapia y la osteopatía, podían comunicarse con el cuerpo de las personas.

Una frase: priorizar la salud de mis pacientes es la forma que tengo de agradecerles la confianza que me tienen.

Me encanta conocer otras culturas y maneras de vivir, sobre todo a través de la gastronomía local y viajando como si fuera un auténtico autóctono de la zona.

Siento una especial conexión con los animales, en especial los perros, que nos enseñan una forma auténtica de amor incondicional.

Una frase: la confianza y la empatía son la base de cualquier tipo de relación y eso es lo que intento transmitir en cada sesión y paciente.